Saturday, June 12, 2010

Los disfraces colgados de Delfos.



En el lobby miraba atenta la proyección con algunas opiniones de Rosario Manzanos sobre los grupos a presentarse en el Desierto. Dijo algo en lo que coincido:"Los Delfos son los niños mimados del medio, que puedo decir... son guapos, altos, excelentes bailarines y muy buenos gestores".
Yo también creo que es un grupo privilegiado, pero no solo por lo que comenta Manzanos, para mi uno de los valores mas importantes de esta compañía es justamente que se han mantenido unidos, que han sabido a través de los años,continuar un proyecto conjunto, un proyecto capaz de convencer y convertirse mas allá de proyecto artístico en proyecto de vida, pero de vida artística común,una convicción tal de excelencia y autoconfianza que llega a ser uno de las herencias fuertes del grupo para su escuela la ESDS.

No hay cosa que difrute mas, que ver interpretes maduros en la escena,independientemente de la edad. Y en el caso de este grupo, todos son bailarines con larguísima e ininterrumpida trayectoria, el entrenamiento hace lo suyo en el cuerpo,la madurez y experiencia de vida completan el cuadro para dotar de herramientas expresivas a los Delfos, un lógico dominio y para mayor disfrute del espectador... el notorio placer, el gusto que provoca el movimiento en un bailarín profesional.

La Obra: Hace un uso de la tecnología muy discreto y que en verdad se siente al servicio de la danza,finas las proyecciones. Personalmente, percibo "Cuando los disfraces se cuelgan" como una obra en extremo cuidada, los diseños de vestuarios y la forma en que están pintados, la coreografía y el movimiento,(característico de la compañía). Aunque me atrevería a decir que a diferencia de lo veniamos viendo en este sentido, se nota una investigación previa y un sustento dramático un poco mas sustancial que la danza por la danza. Hay una justificación para el movimiento, aunque no es propositivo, si alcanzo a notar que hay motivaciones y detonadores como imágenes e historias, hilos conductores y un desarrollo con cada pequeño cuadro o historia que sucede en el escenario.
Dentro de tanta cuidada belleza aparece algo no tan lindo: Hay un momento en que sale una construcción que brinca por la tosquedad con que está construido, una caja con ruedas, foquitos de navidad y vestuarios colgados, que honestamente no llega a cachar con el corte medio surrealista de los demás diseños... Es muy pesado y se le mueve con torpeza. El "carro" o no se como llamarlo, desentona con el resto de los elementos de la obra y aunque la idea es clara, no me pareció que aportara nada a la obra. Otra cosa que se siente gratuita es la escena con los zapatos en la mano, no concluye y tampoco construye llevando a nada...
EXCELENTE EJECUCIÓN, Buenas interpretaciones y una obra que no alcanza colgar en profundidad los disfraces, sin el título que lleva, me parece linda,pero el título me da la idea de riesgo, autoconocimiento, y como dice el programa de mano: "Darnos cuenta de que hay algo más allá de lo evidente".

LA DANZA ES BELLEZA, HERMOSURA... pero también es un arte que puede llevarte a algo mas allá de esta evidente belleza, de la lindura, pucritud y factura de un montaje escénico...Para "Ver mas alla de lo evidente" es necesario un poco más de riesgo, pues tal vez lo que veas no concuerde con la estética de lo bello, pero al final... es VERDADERO y eso dota al arte de la danza de una belleza indiscutible.

Thursday, June 10, 2010

Chamba en el Bi



Me encantó la imagen, una alternativa al material visual que hemos estado viendo con eso del Bicentenario. El equipo Ivette Valenzuela-Juan Casanova del ISC. No es sorpresa, que bueno. Ya quiero ver los demás carteles a próposito.

Lo único que me brincó fué la uña pintada de rosa... que simple, lo sé. Pero a menos que hablemos de body paint o caracterización, nunca me ha gustado el maquillaje "de calle" en los pies de los bailarines ;)

Mucha suerte en la audición, ojalá se queden los adecuados para esta reposición.