Es Jueves a las 19:40hrs en un Centro de las artes de la Universidad de Sonora completamente lleno, el auditorio de Educadis (justo enfrente) se ha conectado en circuito cerrado para transmitir el concierto de la OFS y también está lleno. En contraste con la sala casi vacía del concierto al que fuimos la semana pasada en el teatro de la ciudad, este jueves las salas están a reventar.
En una noche para disfrutar con toda la familia, público de todas las edades escuchó las piezas del gran compositor bellamente interpretadas por la OFS.
Esa mañana tuve oportunidad de estar en el ensayo junto a un grupo de estudiantes de primaria que visitaba el centro de las artes,por lo que presencié el concierto dos veces si puede decirse algo así. Los músicos de la OFS, sin duda tocaron las fibras de toda la concurrencia, el que se quedó corto en ambas ocasiones fué el Coro Diocesano, que aunque cantan excelente y tienen solistas como Gabriela Copca, no llegaron al punto de "poner la piel de gallina", sobra decir que Mozart no es fácil, sin embargo la orquesta dominaba la interpretación de tal forma que uno podía cerrar los ojos o quedarse mirando la perfecta armonía de los movimientos de la orquesta y simplemente vivir la música, vivir el arte en directo, la experiencia estética de escuchar el trabajo de un Gran Artista tocado por artistas. Ojalá que sigan los conciertos de la OFS en la plaza Bicentenario y espacios como el centro de las artes, la familia entera escucha buena música en vivo y gratis.
Bravo por los niños, tíos, primos, abuelos, sobrinos, mamás, papás, novios y esposos que van juntos a estos eventos que nos sensibilizan y ayudan a crecer como sociedad.
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