La Universidad de Chile, la institución de educación superior pública mas antigua en Chile recibe un aporte gubernamental del 10%, el resto debe autofinanciarse. Aquí http://youtu.be/iy-lYm7HJic un pequeño comentario sobre las movilizaciones que están llevándose a cabo en Santiago.
El rector de la UdeCh, se niega a firmar el acuerdo con el Ministro de educación. En la siguiente entrada podrás ver un link a la entrevista con Pérez Vera.
Por mi parte, me parece legítima la preocupación y lucha de los chilenos por acceder a una educación superior gratuita y de calidad. El sueño de todos los latinoamericanos, sin embargo reconozco la accesibilidad de la educación superior en México.
Para muestra: El derecho a exámenes de admisión a la Universidad de Sonora cuesta $600.00, si tienes un promedio mayor a 80 pagas solo la inscripción de cada semestre que es de $230.00 pero si no eres mas o menos estudioso y mas bien medio descuidado y pintero, quizá puedas terminar pagando $1,200 por todo el semestre por cursar entre 7 y 9 asignaturas. Hay varios programas de becas, especiales, representativas, de colegiatura, deportivas, de ayudantía, de servicio social, de titulación, para estudiantes indígenas, para madres solteras, para capacidades especiales, créditos educativos estatales, PRONABES, CONAFE y convenios para pagar en abonos.
En este norteño estado los movimientos estudiantiles comenzaron en el '67, reviviendo luego con la Ley 4, SEUS y la caminata de un nutrido grupo de universitarios sonorenses a la ciudad de México para exigir educación gratuita en la Unison.
La moraleja: Valoremos los privilegios que tenemos en cuanto al derecho a la educación y hagamos que nuestro pobre sistema mejore desde cada aula, cada estudiante, cada profesor, cada Departamento y División, cada tarea, cada clase, cada trabajo, cada ejercicio, cada cerebro y corazón.
Reflexionemos sobre lo que queremos y luchemos por ello. Queremos una educación de calidad, a trabajar pues!
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